La aparición de la tecnología del Blockchain ha generado un nuevo mundo de posibilidades profesionales en el ámbito tecnológico. Pero, curiosamente, a diferencia de otras tecnologías en las que rápidamente han aparecido varios tipos de perfiles ofreciendo habilidades transversales, en Blockchain, hasta muy recientemente, únicamente se demandaban puestos técnicos.
Como es habitual, las primeras fases de implementación, fueron de incertidumbre, con muchas dudas técnicas y la gran mayoría de personas que dedicaban su tiempo al Blockchain eran investigadores y desarrolladores. En estos inicios, ni siquiera las empresas contrataban perfiles con conocimiento técnico; los expertos se dedicaban únicamente a contribuir en comunidades de Open Source y generaban sus ingresos colaborando en el desarrollo de las criptomonedas.
Fue con la aparición de Ethereum, que incorporó la posibilidad de utilizar esta red para crear aplicaciones descentralizadas, cuando empezaron a proliferar de manera significativa los desarrolladores de Blockchain. A su vez, nació el lenguaje Solidity para la programación de contratos inteligentes, convirtiéndose su conocimiento en una habilidad muy valorada en el mercado.
Posteriormente, creció la demanda de profesionales que, además de su expertise tecnológico, fueran capaces de estudiar las compañías con una visión holística y de definir pruebas de concepto para verificar en qué casos se podía utilizar la tecnología, cómo aplicarla y en qué ámbitos, para hacer más eficientes todo tipo de procesos o para crear nuevos negocios digitales.
Actualmente, la tecnología ha avanzado al siguiente stage, en el que empiezan a aparecer las primeras aplicaciones funcionales con la tecnología, más allá de pruebas de concepto. En esta fase se demandan, principalmente, tres habilidades profesionales:
Visión ‘User-Centric’
El Blockchain nació como una tecnología que permitía llevar a cabo el proyecto de Bitcoin, cuya finalidad inicial era crear un método de pago público pero que no dependiera del estado. Desde sus orígenes, la tecnología estuvo centrada en conseguir dotar a los usuarios de un entorno transparente, anónimo y descentralizado, aunque pasando siempre por alto el UX/UI. Es por ello que uno de los grandes problemas del Blockchain hoy en dia es que la mayoría de usuarios no saben cómo utilizar las aplicaciones que se crean y que queda mucho por hacer para que la gestión de claves y tokens sea fácil y asequible.
Por lo tanto, a día de hoy, con el funcionamiento de la tecnología probado, las empresas que trabajan en ella están haciendo grandes inversiones para conseguir que el usuario sea el centro del proceso de innovación. No cabe ninguna duda que la implementación de experiencias cómodas para el usuario será uno de los elementos clave para el éxito de las aplicaciones futuras.
El perfil del especialista UX/UI de Blockchain responde a las mismas habilidades que en cualquier otra tecnología, por lo que no se requiere ningún tipo de formación adicional, ya que la única diferencia entre las aplicaciones descentralizadas y las tradicionales es, simplemente, el uso de los tokens.
Capacidad para comprender y escalar negocios tokenizados
Hoy en día existen relativamente pocos profesionales que se dediquen al Blockchain desde el punto de vista de negocios (sin tener en cuenta aspectos relacionados con la inversión en criptomonedas). En el pasado, incluso la identificación de necesidades de negocio, solía requerir backgrounds más técnicos.
Sin embargo, llegado a este nivel de madurez de la tecnología, cada vez será más importante para las empresas, que cuenten con especialistas que sepan escalar su negocio, si quieren tener una base en Blockchain.
Se requerirán profesionales hábiles en la detección de economías basadas en un token y en analizar los flujos del negocio con creatividad para poder idear nuevas funcionalidades, y que sean resolutivos para poder llevarlas a cabo.
Actualmente, la mayoría de estos perfiles adquieren estas competencias de forma autodidacta gracias a la gran cantidad de contenidos sobre esta temática disponible en la red. De todos modos, cada vez tendrán más éxito los programas de formación en Blockchain y plataformas tokenizadas.
Habilidades sociales para crear comunidades conectadas
Uno de los principales conceptos que rodea siempre al ecosistema Blockchain es el de comunidad. Las aplicaciones basadas en Blockchain transfieren a la comunidad la confianza que hasta ahora se depositaba en un tercero. Por este motivo, las empresas basadas en Blockchain necesitaran perfiles que fomenten y dinamicen las relaciones entre los miembros de la comunidad, así como con los agentes externos.
Un buen rol de Community Builder puede conseguir que la comunidad en torno al proyecto esté más conectada, que haya miembros influyentes que puedan hacerla crecer, puede organizar eventos, promover campañas de marketing, resolver conflictos… En definitiva, una gran cantidad de tareas necesarias.
Estos puestos serán muy similares a los tradicionales de relaciones públicas, variando únicamente el canal por el que se desarrolla la actividad.
El potencial de la tecnología del Blockchain hará crecer, próximamente, la demanda de profesionales y no solo en cuanto a su número sino también respecto a la diversidad de perfiles, debido a la gran diversidad de ámbitos en que el análisis y aplicación de esta tecnología es posible.
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